• Raul Merchan
  • Posts
  • Parecía un gran avance. Pero había trampa.

Parecía un gran avance. Pero había trampa.

Facturar no siempre significa avanzar. Y ese día lo entendí.

Ese mes fue, en teoría, el mejor hasta ese momento.

Clientes grandes. Proyectos ambiciosos. Jornadas de más de diez horas. Y una transferencia que, en números, era la más alta que había recibido nunca.

Desde fuera parecía un gran avance. Pero la sensación interna era extraña.

Porque sabía que, al mes siguiente, todo volvía a empezar desde cero. No había estructura. No había sistema. Solo esfuerzo y horas.

Y lo peor: tampoco tenía la estructura para cumplir con esos proyectos sin generar cuellos de botella. El equipo estaba estancado, atrapado durante meses solo sacando adelante lo que ya teníamos. Sin margen para aceptar nuevos clientes. Sin posibilidad de seguir creciendo.

Por mucho que el ingreso fuese alto, lo que tenía delante no era un negocio. Era una sucesión de trabajos bien cerrados, pero sin ningún tipo de estabilidad real.

Ahí fue cuando entendí que facturar bien no es suficiente. Que sin estructura, sin procesos, sin un modelo que se sostenga, todo resultado es puntual. Y que si cada mes tienes que reconstruir desde cero… estás atrapado, aunque ingreses más que nunca.

Con el tiempo, todo eso cambió.

Y hoy, ese aprendizaje está plasmado en un sitio.
En este sitio: raulmerchan.com/ags

Un abrazo,
Raul